A pesar de que personas de diversas expresiones de género y atracciones románticas y sexuales han existido en una variedad de culturas de todo el mundo a lo largo de la historia humana, la documentación de sus vidas es difícil de lograr. Rara vez existieron espacios seguros para que las personas formaran una comunidad.

Alrededor de la década de 1950, la atmósfera política y religiosa en los Estados Unidos, agravada por el miedo al comunismo de la Guerra Fría y patologización de la homosexualidad en el campo de la psiquiatría, generó una cultura represiva que amenazaba el bienestar físico y económico de cualquier persona que declaraba su inclinación/preferencia de género o sexual.

Fuera de la vista del público, la gente se buscaba entre sí en bares y otros lugares, a pesar de las frecuentes incursiones de la policía y el castigo por bailar con miembros del mismo sexo o el uso de ropa considerada inapropiada para su género. La información sobre estos lugares se extendió de boca en oreja y las personas LGBTQ+ crearon subculturas con sus propias y normas sexuales y/o de género. Organizaciones homófilas como la Mattachine Society y las Daughters of Bilitis comenzaron a formarse en los años 50 y 60 en las grandes ciudades, sobre todo para gais y lesbianas blancas de clase media-alta. En junio de 1969, disturbios contra la brutalidad policial estallaron en el Stonewall Inn, un bar gay en Greenwich Village que atendía en su mayoría a marginados de la corriente principal, incluyendo personas de color e individuos no conformes con su género, trabajadoras(es) sexuales y jóvenes sin hogar. Tales disturbios son generalmente considerados como el inicio del movimiento de liberación homosexual moderno.

En cuanto a Durham, existe poca documentación sobre la vida LGBTQ+ antes de la década de 1970, especialmente cuando se trata de personas de color y transgénero. Si usted tiene información o historias para contribuir, por favor ingrese a la página de Donaciones para apoyar a la colección.